La sociedad como factor de estudio comunicativo hace que todo hecho, palabra, circunstancia y el más mínimo elemento comuniquen para el hombre; para entender y relacionarse es necesario conocer las características que cada una de las personas tiene en su identidad para transmitírsela a los demás.
Cuando se habla sobre los elementos comunicativos que un graffiti tiene, se encuentra la forma más sencilla y compleja de entender, es decir, para quienes ven por un momento una forma de expresión encuentran: una frase, un dibujo o diferentes elementos con los que se identifican porque cada ser humano interpreta de diferente manera un concepto.
Para la sociedad la forma de mostrar éste arte, muchas veces es entendido como un vandalismo, pero si retoma cada uno de los mensajes y la forma de expresar y comunicar un mensaje no debe ser entendido como contaminación visual o lo que muchos llaman canallas por escribir en murales.
Visto desde la realidad en la que se encuentra el hombre es necesario utilizar las diferentes formas de comunicación para interpretar y analizar las representaciones de vida de la comunidad para mejorar la calidad de vida y los lasos comunicativos.
El graffiti debe ser una herramienta que ayude a generar conciencia y sobre todo a crear las posibilidades de quienes sientan la necesidad de plasmar su arte y sus mensajes, siempre y cuando estos sean dados para el mejoramiento de la sociedad y para la utilización dentro de procesos comunicativos.
Por el contrario, si nos remitimos al concepto etimológico e histórico del arte, este seria concebido como la producción realizada por el hombre y el saber hacer de las disciplinas, haciendo posible que el arte no solamente se base en el estilo al momento de diseñar, sino que este sea concebido como una manera de expresar sus ideas y sus emociones ya sea a través de diversos recursos; como los plásticos, lingüísticos, sonoros, pictóricos, escritos o mixtos, mientras que si tomamos en cuenta el graffiti como arte, este no seria solamente una palabra, ni cualquier cosa pintada en una pared o incluso una imagen estética urbana, sino que este puede estar plasmado en cualquier parte y de diversas maneras.
El graffiti a través de los años se ha encargado de abordar diferentes teorías y posturas, las cuales han permitido mostrar diversas características de cada país del continente, generando no sólo una costumbre destacada, sino también un estilo que nos permite hablar de un nuevo boom del momento del graffiti. Según la postura de Fernando Figueroa y Jesús de Diego, el graffiti nos lleva a pensar desde diversos puntos de vista, un ejemplo claro de esto es cuando el arte se muestra superficialmente de todo lo que lo concierne o lo constituye o cuando le brinda la oportunidad a aquella persona que no tiene ningún tipo de profesión, buscar nuevas oportunidades de vida a través de un mercado organizado regulado, controlado y supervisado por este mismo.
“El escritor de graffiti libera al arte de la prostitución, evidencia que el hombre puede asumir su entidad como artista sin tener que adoptar a la vez el papel de un chulo que se vende a su vez.”, Fernando Figueroa y Jesús de Diego.
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